jueves, 6 de junio de 2013

En la habitación

Te resguardas del frío en la habitación, creyendo que ahí dentro encontrarás la primavera.

La persiana bajas con cuidado, sigilosa por no espantar. Rozando el interruptor intencionadamente, apagas una a una las estrellas que te cantan al oído, que te dan las buenas noches.

Créeme, echando el pestillo no evitas que los monstruos de allá fuera entren, sino que los bestias de aquí dentro nunca salgan.


De noche todo son sombras. No hay caretas; no hacen falta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario