Cuento
Regálame recuerdos,
Regálame recuerdos,
hurga en mi memoria
y, si editas nuestro cuento,
méceme acurrucadito,
así el tiempo que tengamos
todo el rato será nuestro.
Haz que cale el viejo mar;
no hay distancias de metal,
ni destiempos en el viento;
será nuestro todo el rato,
simplemente,
será nuestro.