El Valle de la Nostalgia

Se transforma, cambia y avanza. Entonces nos damos cuenta de que el ayer solo se entretiene dando empujones hacia un futuro incierto, o tal vez no lo sea tanto? Y ante el precipicio, y sin intención de coger carrerilla, caemos hacia al valle de la nostalgia.

 

Amarga rutina

Me dabas la mano por la carretera.

El frío nos empujaba

y yo oía tu voz rozar mi cadera

sin ni siquiera habernos mirado.

La lluvia, insistente, penetra,

El calor fatigador huía

y yo por la senda buscaba tu luz

sin ni siquiera haberte probado.

Te disfrazabas de fragancia entre las pestes.

Las estrellas nos acurrucaban

y yo, inocente,

permitía que me quitaras la vida.

Amarga rutina, eterna,

nos envuelves entre tus sábanas

y nos ahogas.

Yo muero de asfixia

y aspiro, inconsciente, a un nuevo día.

                                                                                                          

Acordes de fa

Éramos dos personas sin rostro, con música, sin habla;
con intereses comunes, gustos afines, materias pendientes,
con hormonas en vena, sin años que pesen,
con ilusiones sinceras, sin horas que no sean intensas...

Éramos dos adolescentes sin piercings, con vida, sin genio;
Tarareando letras profundas, acordes desnudos, canciones eternas,
Bailando al compás de las guitarras eléctricas,
Sintiendo emociones en sangre grabando el directo.

Éramos dos compañeros sin vergüenza, con recuerdos imborrables, sin prejuicios;
Capturando esa noche especial en fotos con flash,
Sonriendo al verles hablar entre acordes de Fa,
Mirándonos extasiados por tanta felicidad.

Éramos compañeros; Somos amigos.

 

Porque sin duda fue un día especial, uno de los mejores. Gracias

con VIRGINIA LABUAT

Son tantas cosas

 

Una voz desgarrada que me habla

es callada, tapada  (no suena, no grita)
Por mí, porque sí, porque son tantas cosas:

Son sospechas,

palabras casadas con actos ajenos
que pueden herir, desconfiar de ti;

Son horarios,

hechos nucleares con fecha caduca
que dicen me salgo, cuando acaban de abrir.

Una voz silenciosa que me susurra,

me obliga, me incita a bajar el telón

Por ti, porque sí, porque son muchas cosas.